Fresones con vinagre

Hubo un tiempo en que todo el mundo en este país preparaba los fresones con vinagre, cuando la costumbre de añadirles nata ni siquiera existía. Poco a poco esta manera de prepararlas se fue perdiendo hasta el punto que en la actualidad poca gente sigue haciéndolo, encontrando incluso extraño mezclar el vinagre con una fruta. 

Como en casi todas las preparaciones tradicionales existe un punto de lógica que explica el por qué del uso de un determinado ingrediente. Macerar en vinagre las fresas o fresones permite extraerles todo el jugo, dejando un sabroso jarabe agridulce que no es posible obtener con el empleo de la nata. En estos tiempos en que los sabores agridulces vuelven a estar de moda tal vez es el momento de rescatar esta forma de preparar los fresones con un 0% de grasa. Además gracias al vinagre hasta los fresones más ácidos nos parecerán caramelos.

INGREDIENTES (4 personas) :

Medio kilo de fresones
50 gramos de azúcar glass (impalpable)
25 ml de vinagre (de vino blanco o de manzana)


Lavamos y cortamos los fresones en trozos no muy pequeños. Los espolvoreamos con azúcar glass, removiendo para que queden bien impregnados, y lo mismo hacemos con el vinagre, con cuidado de no dañar los fresones sobretodo si son demasiado maduros.

Dejamos en la nevera para que maceren bien un mínimo de 6 horas y listos para comer. Están bárbaros, pero no os paséis con el vinagre. Sólo un poco más de una cucharada es más que suficiente.