Ahora que se acerca el buen tiempo podremos volver a gozar de los melones de temporada. Para elegir el mejor melón de tipo piel de sapo - el más común en España - debemos sopesarlo y por comparación será mejor aquel que a mismo tamaño posea el mayor peso. También es conveniente olerlo ya que a través del aroma reconoceremos si es poco fragante - está verde - o demasiado maduro. Otra prueba a hacer es apretar los extremos. Si se hunden ligeramente quiere decir que está listo. Y la última prueba es mirar el tipo de rayado de la piel. Si este es longitudinal y va de extremo a extremo estaremos ante un melón macho. Si en cambio el rayado es concéntrico estamos ante un melón hembra. Los melones hembra son más dulces y suelen ser mejores a nivel de sabor que los machos. Si os fijáis en la pila de melones de vuestro supermercado os será difícil - aunque no imposible - hallar melones hembra. Esto se debe a que los mayoristas de fruta suelen reservar los mismos para los restaurantes y llegan en menor medida a los consumidores.