
INGREDIENTES
1 redondo de carne (sin atar)
1 cebolla
2 zanahorias
Hojaldre
Foie Grass
Vino tinto
Laurel
Vinagre
Pimienta
Sal
Huevo
Harina
El día anterior colocamos el redondo en una fuente honda cubierto completamente de vino, una cucharada de vinagre, la cebolla y las zanahorias cortadas en juliana y una hoja de laurel. Dejamos reposar en el frigorífico durante 24 horas.
Al día siguiente extraemos el redondo, lo secamos y salpimentamos, cubriéndolo a continuación completamente con foie-grass, reservando el marinado. Dejamos reposar la carne durante una hora a temperatura ambiente. Una vez hecho esto, extendemos el hojaldre y lo enrollamos alrededor del redondo. Cerramos el hojaldre de manera que la carne quede bien sellada. Si queremos y nos sobra hojaldre, lo típico es montar un enrejado decorativo. Pintamos el hojaldre con la yema del huevo para que al hornearlo adquiera un bonito color dorado. Precalentamos el horno a 220 grados e introducimos la carne hojaldrada durante media hora o hasta que el hojaldre se dore completamente. Ya está listo para servir.
Podemos hacer una sabrosa salsa con el marinado. Para ello calentamos el caldo en una cazuela salpimentándolo y pasándolo por la batidora eléctrica. Para que espese añadimos tres cuchadaras de harina de trigo y vamos removiendo con una batidora de varillas para que no se formen grumos.
Se sirve cortado en rodajas finas y cada filete mojado en la salsa del marinado.
Para los que aún no confíen en "media hora" de horno, una variante consisten en hornear la carne durante dos horas a 180 grados mojándolo con el caldo del marinado y luego colocar el redondo dentro del hojaldre para media hora extra de calor a 220 grados. Pero claro, no es realmente "a la Wellington"...