Este es un postre que crea adicción. Se pueden servir con nata, azúcar glass, sirope de fresas o chocolate, miel o caramelo.Seguro que dais la campanada con ellos esta Navidad.
INGREDIENTES :
4 manzanas muy grandes
1 huevo
1 cucharada y media rasa de harina de trigo
2 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de azúcar
Una cucharadita de levadura química (alrededor de 5 gramos)
Canela en polvo
Canela en polvo
Agua con gas
Aceite virgen extra de oliva
En un bol mezclamos el huevo con la harina, la levadura química y una cucharadita de canela en polvo. Utilizamos la batidora de varillas para eliminar los posibles grumos. La mezcla probablemente ha quedado algo espesa. La rebajamos con agua con gas - o agua normal, si no tenéis - hasta que quede con la consistencia de una papilla más bien líquida.
Pelamos las manzanas y les quitamos el corazón. A continuación las cortamos en rodajas no muy gruesas que inmediatamente rebozamos en harina para después llevarlas al bol de la "papilla". Hay que hacerlo rápido para que las rodajas de manzana no se oxiden.
Una vez los aros de manzana están bien empapados de la papilla las escurrimos bien antes de meterlos en una sartén con dos dedos de aceite bien caliente. La fritura debe ser burbujeante siendo innecesario dar la vuelta al aro de manzana si hemos tenido la precaución de llenar suficientemente la sartén con el aceite. También es preciso evitar que los aros se toquen entre sí. En menos de un minuto la manzana estará dorada e inflada.
Retiramos las manzanas a medida que las vamos haciendo y las colocamos sobre un papel absorbente. Se pueden servir tal cual o espolvoreando por encima canela o azúcar glass, o bien bañándolas en miel, sirope de cualquier sabor o caramelo.
Es uno de esos postres que no se olvidan.