Una sencilla receta oriental y además muy barata.
400 gramos de pechuga de pollo
Sal
Pimienta
Aceite virgen extra de oliva
Para la salsa
Se sirve caliente, generalmente acompañado de arroz o de verduras al vapor.
INGREDIENTES (4 personas) :
400 gramos de pechuga de pollo
Sal
Pimienta
Aceite virgen extra de oliva
Para la salsa
100 gramos de semillas de cacahuete peladas y sin sal
100 ml (medio vaso) de caldo de pollo
150 ml (3/4 de vaso) de leche de coco.
1 cucharada de pasta de curry rojo (o en su defecto, una cucharada de curry convencional)
El zumo de un limón (o de una lima)
En primer lugar troceamos las pechugas en cubos rectangulares de tamaño medio. Las salpimentamos. Vertemos un chorro generoso de aceite de oliva en una sartén y doramos la carne por todos lados. Retiramos y reservamos.
En primer lugar troceamos las pechugas en cubos rectangulares de tamaño medio. Las salpimentamos. Vertemos un chorro generoso de aceite de oliva en una sartén y doramos la carne por todos lados. Retiramos y reservamos.
Para la salsa pelamos los cacahuetes y los trituramos tanto como podamos. A continuación añadimos el resto de ingredientes y mezclamos bien.
Vertemos el líquido resultante en una cazuela y a fuego lento reducimos hasta obtener una salsa con la consistencia que deseemos (algo más densa que la mahonesa es lo habitual, pero tampoco pasa nada si la queréis más líquida).
Cuando ha tomado la textura deseada, añadimos el pollo y mantenemos un par de minutos.
Cuando ha tomado la textura deseada, añadimos el pollo y mantenemos un par de minutos.
Se sirve caliente, generalmente acompañado de arroz o de verduras al vapor.