Ya habíamos hablado de la interesante gastronomía croata, una auténtica amalgama de cocina centroeuropea, oriental y mediterránea. La costa croata, probablemente el último paraíso europeo, es el reducto más fiel a la cocina mediterránea basada en gran medida en pescados y mariscos. El skampi na buzaru es un plato autóctono que se puede confeccionar con langostinos, mejillones o cigalas donde el término "buzaru" aludiría a la salsa. El nombre buzaru o buzara es de difícil clasificación etimológica. Una posibilidad es que se trate de un palabra del dialecto véneto que vendría a significar estúpido o tonto, si bien no se entiende muy bien la relación que este significado podría tener con esta receeta. Otra posibilidad es una palabra autóctona iliria modificada por el idioma eslavo croata, llegado el siglo VII, hasta hacerla irreconocible.
He dudado también en incluir esta receta por dos razones fundamentales. La primera porque emplea un ingrediente denominado "vegeta" que es bastante difícil de encontrar fuera de Croacia o de aquellos lugares con gran presencia de inmigrantes croatas (como es el caso de Alemania). La vegeta es una mezcla de especias que se utiliza como potenciador del sabor. No la voy a utilizar en la receta por lo que si eres croata o has comido con anterioridad buzaru la echarás en falta. La segunda razón que me hacía dudar era la inclusión o no de cebolla en el sofrito. Para algunos es una herejía, para otros un ingrediente imprescindible. Parece ser que la receta "oficial" no la incluye pero he hecho la prueba y prefiero incluir cebolla. En cualquier caso es un plato muy fácil y rápido de preparar y que permite hacerlo tan picante como se quiera.
INGREDIENTES :
Langostinos según el número de comensales (5/6 por cabeza)
Vino blanco1 cebolla grande
2 ó 3 dientes de ajo
1 tomate maduro
Perejil
Harina de galleta o miga de pan
Sal
Pimienta negra molida
Vegeta (opcional)
Aceite virgen de oliva
En una cazuela con aceite de oliva freimos muy ligeramente los langostinos mas que nada para que el aceite coja el gusto. Con uno o dos minutos debería ser suficiente. Retiramos y reservamos.
Ahora hacemos un sofrito de ajo y cebolla, muy muy rayados. Cuando cojan color añadimos el tomate sin piel ni semillas también rayado. Sazonamos con sal al gusto y bastante pimienta negra (es un plato algo picante). En el momento en que el sofrito coja textura añadimos los langostinos que bañamos con el vino necesario para que cubra el marisco. Para que la salsa quede espesa incorporamos o bien harina de galleta o mejor miga de pan un poco seca y bien desmenuzada. Echamos una buena cucharada de perejil picado y si queremos más pimienta negra. En casos extremos de afición a lo picante se pueden añadir hasta bichos. Se deja cocer durante un cuarto de hora y ya está listo para comer sin etiqueta : directamente con las manos a pelar los langostinos y mojar pan en la salsa. Si teneis vegeta se debe añadir cuando hemos echado el vino.
Como he comentado al principio se puede utilizar cigalas o mejillones, a vuestro gusto.