Pastel de chocolate

Este es el pastel de chocolate que todo chocoadicto debería probar al menos una vez en su vida. Solo con mirar la foto ya dan ganas de darle un bocado.

Es muy parecido al brownie porque como éste no lleva ningún tipo de levadura. Casi nunca se sirve caliente, siempre frío, acompañado de nata montada o de alguna compota de frutos del bosque. Además se hace rápido y requiere muy pocos ingredientes.

INGREDIENTES 

  • 100 gramos de harina
  • 100 gramos de mantequilla
  • 100 gramos de cacao sin azúcar en polvo
  • 250 gramos de azúcar
  • 2 huevos
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla o una cucharada de azúcar vainillado
  • 1 pellizco de sal

En primer precalentamos el horno a 200 grados. Mejor si no se emplea un horno por convección de aire porque entonces el pastel tiende a secarse demasiado. Si es lo que tenéis, reducid la temperatura a 180 grados.

En primer lugar batimos con las varillas la mantequilla fundida con los huevos, hasta que se forma una crema. Si tenéis esencia de vainilla líquida, se añade ahora. Si es azúcar vainillado, esperad.

A continuación añadimos los componentes secos (harina, cacao, sal, azúcar y azúcar vainillado, si es el caso) convenientemente tamizados. Mezclamos bien y batimos para conseguir una pasta homogénea.

Vertemos la masa en un molde de unos 22 cm de diámetro para pasteles (de paredes bajas). No utilicéis uno que sea hondo o de tipo rectangular porque no queda bien. Debe hornearse por igual y con muy poco grosor, como mucho 2 cm de alto. Engrasad el molde - a no ser que sea de silicona - con mantequilla.

Se hornear exactamente 15 minutos y listo.

Se deja enfriar, se desmolda y luego se lleva al refrigerados y al cabo de un par de horas listo para ser consumido. Casi siempre se sirve con nata montada o compota de arándanos o frambuesas, también con vainilla.

Más fácil no podía ser.