Esta receta es muy apropiada para la cena de Fin de Año, más basada en la degustación que en la copiosidad de otras comidas navideñas. Además se le atribuye un carácter afrodisíaco, lo cual también casa mejor con la última cena del año.
El carácter afrodisiaco de los alimentos en todos lo casos es falsa - a no ser que los rellenéis de Viagra - pero como el sexo está en realidad en el cerebro, no en los bajos, pues si crees en él seguro que lo obtendrás.
La palabra "vieira" es gallega y su equivalente en castellano es "venera" - palabra que por cierto nadie utiliza - de la misma procedencia que "enfermedad venérea" o "venal". Esto se debe a que tanto las ostras como las vieiras se asocian al aparato reproductor femenino y de ahí a relacionarla con el sexo media casi nada. Por supuesto que cualquiera, por el carácter mental del sexo, podría decir que un plato de garbanzos es también afrodisiaco pero algunos alimentos, por su forma, dan más pie a la imaginación (los garbanzos la verdad que no recuerdan a nada). Por ejemplo en muchos países se considera que la forma fálica de los espárragos potencia la vida sexual.
INGREDIENTES (aprox 4 servicios) :
La ración normal es la carne de unas 5/6 vieiras por comensal. Si la compráis congelada podeís meter dos o tres raciones de carne por cada valva (en España, "concha")
Una cebolla morada grande
Jamón serrano (alrededor de 100 gramos)
200 ml de nata para cocinar
1 tomate rallado
Medio vaso de cava, champaña o vino blanco de aguja
2 cucharadas de harina de trigo
Aceite virgen extra de oliva
Pimienta
Sal
Considero que compráis las vieiras ya limpias y congeladas. Si las compráis frescas las debéis lavar muy bien para eliminar la arena.
En una sartén con un chorro de aceite de oliva doramos ligeramente la carne de las vieras. Retiramos y reservamos.
En el mismo aceite freímos la cebolla rallada y cuando transparenta le añadimos las dos cucharadas de harina y un poco de tomate rallado. Vertemos el cava y mantenemos a fuego medio hasta que reduce a la mitad, más o menos. Seguidamente añadimos el jamón bien picado. A continuación incorporamos la nata para cocinar y mantenemos a fuego medio hasta que empieza a espesar. En ese momento rectificamos de sal y pimienta y retiramos. Incorporamos la carne de las vieiras y con la masa resultante rellenamos las valvas (como ya he dicho, añadiendo tres porciones por cada valva).
Precalentamos el horno a 180 grados y conectamos el gratinador.. Introducimos las valvas y mantenemos hasta que la superficie empieza a dorarse (con 10/15 minutos debería ser suficiente)
Se sirven templadas acompañadas de cava.