Este es un plato que podéis preparar al menos en parte un par de días antes de que se celebre la comida navideña y así poder dedicar el mismo día a otros platos más complejos y que no se pueden preparar con antelación. Además es barato y fácil de hacer.
INGREDIENTES (4/6 personas)
Un pollo de 1 Kg cortado como si fuera a hacerse al ajillo
1 Kg de tomates rojos maduros
2 cebollas grandes tiernas
Dos docenas de aceitunas negras
harina de trigo
1 vaso de aceite virgen de oliva
1 vaso de vinagre de vino
3 dientes de ajo
laurel
1 clavo (opcional)
pimentón dulce (opcional)
sal
Vingre balsámico (opcional)
Aceite virgen extra de oliva
Enharinamos y salamos los trozos de pollo y los freímos en abundante aceite. Una vez estén dorados los colocamos en una cazuela de barro.
En el mismo aceite donde hemos frito el pollo colocamos los ajos, el laurel, el clavo y una cucharadita de pimentón dulce y lo dejamos hervir a fuego lento. El pimentón dulce es mejor ponerlo al final porque si nos pasamos en la cocción amarga. Cuando esta cocción está en marcha añadimos el vaso de vinagre y lo mantenemos 3 minutos más. A continuación vertemos la mezcla sobre los trozos de pollo. Dejamos enfriar, metemos en el frigorífico y en 24 horas ya estará listo para el consumo.
El día de la comida sólo tendremos que emplatar de la siguiente manera : el la base del plato las cebollas cortadas en juliana. Sobre la cebolla los tomates picados sin piel ni semillas, las aceitunas negras y encima de todo los trozos de pollo. Se aliña con el mismo escabeche o si se quiere con aceite virgen extra "limpio" y con vinagre balsámico.