Un postre muy sencillo de hacer y que, si no me equivoco, es originario de Canarias si bien hay uno muy similar de procedencia venezolana. Se hace en diez minutos y gusta mucho a los niños.
INGREDIENTES :
1 banana por comensal
2 cucharadas de azúcar
2 huevos
2 cucharadas de harina de trigo
Canela en polvo
Aceite virgen de oliva o de girasol/maíz
Las medidas anteriores nos servirían para cocinar unas cuatro bananas.
Pelamos las bananas y les quitamos las hebras longitudinales. Las ponemos en una cazuela y vertemos sobre ellas agua hirviendo de manera que queden cubiertas. Las mantenemos así durante unos cinco minutos. Es decir, no se hierven directamente, si no que se les sumerge en agua hirviendo.
Transcurrido el tiempo las retiramos con cuidado de no quemarnos, incorporándolas a un bol con el azúcar, los huevos, la harina y media cucharadita de canela en polvo y trabajamos la masa con un tenedor, por ejemplo, hasta que todo quede triturado (no hace falta que quede una masa muy fina y homogénea). Si no os gusta la canela se puede emplear vainilla.
Con la masa podemos hacer cuatro tortas pequeñas o bien un par grandes, siempre teniendo en cuenta que ahora los tenemos que freír y cuanto más pequeños sean las tortas más fáciles serán de freír y voltear Se fríen en abundante aceite hasta que quedan doradas, sirviéndose frios o calientes, al gusto, acompañadas de nata o helado si se desea.
Transcurrido el tiempo las retiramos con cuidado de no quemarnos, incorporándolas a un bol con el azúcar, los huevos, la harina y media cucharadita de canela en polvo y trabajamos la masa con un tenedor, por ejemplo, hasta que todo quede triturado (no hace falta que quede una masa muy fina y homogénea). Si no os gusta la canela se puede emplear vainilla.
Con la masa podemos hacer cuatro tortas pequeñas o bien un par grandes, siempre teniendo en cuenta que ahora los tenemos que freír y cuanto más pequeños sean las tortas más fáciles serán de freír y voltear Se fríen en abundante aceite hasta que quedan doradas, sirviéndose frios o calientes, al gusto, acompañadas de nata o helado si se desea.