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Sienta una avestruz a tu mesa de Navidad

Tal vez estés cansada/o de repetir siempre las mismas recetas para tus ágapes de Navidad. Quieres probar cosas nuevas sin que la novedad sea vista como algo excéntrico y desde luego sin que se cuestione la calidad del resultado.
Creo que con la carne de avestruz podéis dar la campanada.
La avestruz es un ave de gran tamaño que vive en las sabanas africanas. No puede volar, pero a cambio es capaz de desplazarse a velocidades sostenidas cercanas a los 60 kilómetros por hora. No voy a explicar gran cosa sobre esta ave porque todos la hemos vistos en documentales y en el zoo de nuestra ciudad. 
Lo que no todos saben es que desde el siglo XIX existen granjas en las cuales se crían avestruces para obtener carne. La carne es una mezcla entre la carne de pavo o pollo y la carne de ternera ; sin embargo es un tipo de carne muy rico desde el punto de vista nutricional - con valores que superan a las carnes anteriormente mencionadas - y con muy poca grasa, lo que la hace muy sana.
Para cocinar avestruz debemos tener en cuenta la cantidad y el modo de disponer de la misma. Para cortes pequeños, se la puede considerar y tratar igual que el pollo o el pavo. Cuando tenemos cortes mayores - bistec de avestruz o solomillo - se la considera igual que la ternera, sólo que menos grasa y también menos dura. A efectos prácticos, la carne de avestruz es un tipo de carne roja. 
En muchos países es posible encontrar avestruz en las carnicerías procedentes de granjas de cría locales. Si no hay granjas locales el producto suele proceder de Suráfrica, el mayor exportador. Incluso es bastante habitual encontrar suministradores online. En España he encontrado "El Club de la Carne" (http://www.elclubdelacarne.com/carnes-exoticas-1/carnes-africanas/carne-de-avestruz/solomillo-de-carne-de-avestruz-1.html) que vende 400 gramos de solomillo de avestruz a unos 13 euros.
Una avestruz no es un pollo "grande". Por tanto los despieces no son iguales que los del pollo, procediendo mayormente de las piernas, los muslos y su parte posterior, no existiendo "pechuga".  La carne se comercializa formato de bistec, solomillo o estofado, aunque también se pueden encontrar hamburguesas o salchichas de avestruz.
La carne de avestruz se considera poco hecha con 6 minutos y muy hecha con 14.
Para cocinar avestruz hay que hacerlo como si fuera ternera pero al ser menos dura los tiempos de cocción son menores. También hay que tener en cuenta que tiene menos grasa, por lo que si realizas un horneado hay que cocinarla siempre "a la poulé", esto es, envuelta en bacon o de otro modo la notaréis demasiado seca.
Hay muchas recetas de avestruz. Hoy os presento una con poco riesgo que seguro que encanta a vuestros
invitados.


Solomillo de avestruz a la salsa de mostaza 


INGREDIENTES (4 personas) :

100 gramos de carne de solomillo de avestruz como mínimo por comensal. Por tanto necesitáis para 4 personas un solomillo de 400 gramos como mínimo (lo recomendable sería 150-200 gramos por comensal)
Bacon
Media cebolla mora tipo "Figueres"
1 diente de ajo
2 cucharadas de mostaza francesa
Medio vaso de crema de leche
Medio vaso de vino blanco
Medio vaso de caldo de pollo
Sal
Pimienta negra molida
Aceite virgen extra de oliva
Perejil

Precalentamos el horno a 190 grados. Cogemos el solomillo entero y lo salpimentamos. A continuación lo envolvemos completamente en bacon y lo horneamos durante veinte minutos.

Mientras horneamos el avestruz vamos a hacer la salsa. En una sartén vertemos un chorro generoso de aceite de oliva y en el freímos la cebolla y el diente de ajo bien picados. Cuando la cebolla empieza a transparentar, añadimos el vino y cuando reduce a la mitad incorporamos la mostaza (recordad, debe ser mostaza francesa bien fuerte, de esa que al llevarla a la boca se va directamente a la nariz y casi nos hace estornudar). Disolvemos bien la mostaza en el vino. A continuación añadimos la crema de leche, el caldo de pollo y una cucharada de perejil picado además de media cucharadita de sal.
Ponemos a fuego medio y en ese momento añadimos los solomillos con el bacon que retiraremos al servir,  dejando hervir durante cinco minutos.
Preguntaréis varias cosas. ¿Por qué no hacer el solomillo con la salsa? Porque es poco graso y no aporta suntuosidad a la salsa. Es mejor hacerlo al horno e incorporarlo a última hora. Por la misma razón es preciso envolverlo en bacon para evitar que se seque. 

Lo mejor es servir las raciones acompañadas de setas salteadas - champiñones o gírgolas - o una patata asada al horno. Es una receta de sabor refinado que no desmerece ninguna mesa navideña.