La crema de pistachos se puede hacer dulce o salada, esto es, a modo de postre o como entrante. En este caso voy a mostrar una crema de pistacho salada. No es una crema difícil de hacer aunque el hecho de que debamos pelar las semillas complica un poco el proceso.
INGREDIENTES (4 personas) :
1 cebolla grande morada tipo "Figueres"
1 diente de ajo
1 patata mediana
250 gramos de pistachos
150 gramos de queso rallado cremoso (havarti, emmenthal, cheddar etc)
1 vaso de nata para cocinar (200 ml)
Agua o caldo de verduras (1 litro)
Sal
Pimienta
Aceite virgen extra de oliva
En primer lugar debemos pelar los pistachos. Para ello los colocamos en un bol y vertemos sobre ellos agua hirviendo de manera que los cubra con holgura. Los dejamos en remojo unos 20 minutos y luego vamos pelándolos hasta que queda la semilla verde sin rastro de piel. Es preferible entonces meterlos en el horno a 200 grados para que sequen, no más allá de unos 15 minutos.
En una cazuela grande vertemos un chorro generoso de aceite de oliva. Troceamos la cebolla, al igual que el diente de ajo sin el germen y los freímos hasta que la primera transparente. En ese momento incorporamos los pistachos y los cubrimos lo justo con agua o caldo de verduras. Los dejamos cocer hasta que se ablanden ligeramente.
En ese momento pasamos la batidora eléctrica hasta que queda un puré muy fino. Añadimos el resto del agua o caldo y llevamos a ebullición. Entonces añadimos el queso rallado y removemos hasta que se disuelva. Retiramos del fuego e incorporamos la nata. Probamos el sabor. Si todo ha ido bien sabrá a una mezcla de leche, queso pero sobretodo a pistachos. Rectificamos de sal y pimienta.
Para que quede fina pasamos la crema por un colador. Se sirve muy caliente y si se quiere con algunos pistachos troceados por encima a modo de decoración.