Una receta muy sencilla que encantará a todos los de casa.
INGREDIENTES (para una docena de San Jacobos) :
6 berenjenas moradas grandes
6 lonchas de jamón York
6 lonchas de queso semigraso (havarti, emmental etc)
2 huevos
Harina de trigo
Pan rallado
Sal
Pimienta
Aceite virgen extra de oliva
Cortamos los extremos de las berenjenas así como los lados - para dejarlas algo así como un rectángulo - y sin pelarlas las cortamos longitudinalmente en cuatro trozos. Colocamos todos los trozos en un bol con abundante agua fría y un buen puñado de sal. Deben permanecer al menos una hora en remojo. Esto es importante, no os saltéis este paso o las berenjenas estarán amargas y chuparán todo el aceite de la fritura.
Transcurrido el tiempo de remojo las sacamos del agua y las escurrimos. A continuación emparejamos las lonchas de berenjena de manera que cada par tenga más o menos el mismo tamaño.
El siguiente paso es salpimentarlas por ambos lados. Seguidamente colocamos entre cada par de berenjenas una loncha de jamón y otra de queso, de manera que quedará como si fuera un bocadillo.
A continuación rebozamos en harina, luego en huevo y finalmente cubrimos con pan rallado.
En una sartén con una buena cantidad de aceite de oliva freímos los San Jacobos a fuego medio bajo para que la verdura se haga y además para que el queso se funda y no se queme. Se doran por ambos lados, se secan en papel absorbente y listos para comer bien calientes.