La cantidad de sal que consumimos en nuestra alimentación diaria rebasa con exceso lo máximo recomendado por la OMS. Dicha situación, en lugar de concienciar a los fabricantes de alimentos, parece que ha espoleado el incremento de la misma como un ingrediente 'vital y predominante' en gran cantidad de productos. No dejéis de leer este artículo publicado en el directorio de Salud del periódico "El Mundo".