Ya era hora que se hiciera algo para intentar recuperar el prestigio del jamón ibérico, objeto de sospechas por parte de la comunidad internacional. A pesar de lo que nos han dicho nuestros mandamases, la verdad es que los productos españoles están más que cuestionados en el extranjero 'gracias' a las manipulaciones que realizan cuatro desalmados. Uno de dichos productos era el jamón ibérico, pero no es un caso único.
El azafrán español, que copa el 50% del mercado mundial, es objeto de ataques que le acusan de emplear colorantes químicos para potenciar su sabor, de suministrarse con unas tasas de humedad que adulteran el peso real del producto (4 gramos valen casi 40 euros) y de re-envasar y hacer pasar por español azafrán que procede de terceros países (España produce 1.5 toneladas anuales pero exporta como azafrán español un total de 190 toneladas, disparidad que levanta serias suspicacias).
El aceite también anda bajo sospecha por el re - etiquetaje de aceites procedentes de terceros países que se hacen pasar por españoles y la manipulación de los stocks para provocar precios al alza.
Y los productos hortofrutículas, bajo la atenta mirada de Europa por la cantidad de pesticidas con que suelen tratarse....vamos, que de orgullo nacional podemos pasar en poco tiempo al ostracismo si no se toman medidas y muy serias con todos los productos, redoblando el control de calidad para los productos punteros.
En Suiza no se les ocurre permitir piezas de plástico insertadas en ningún reloj que se produce en el país. Y por la misma razón nadie les discute la supremacía relojera mundial. Es una cuestión de exigirse calidad a uno mismo. Aquí podéis leer el tema del jamón ibérico tal y como lo publica "ABC".