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Sopa de aleta de tiburón....sin tiburón

sopa de aleta de tiburon
foto de wikimedia

Esta es una de las sopas más controvertidas que existen puesto que debido a ella se sacrifican miles de tiburones a diario en todos los mares del mundo. En la antigua China la sopa de aleta de tiburón era un manjar destinado a las clases más pudientes, pero en la actualidad gracias al crecimiento económico del país la demanda ha subido hasta el punto de poner en serio peligro a gran parte de la población de escualos.
Se da la circunstancia que la aleta de tiburón no añade ningún sabor a la sopa, sino que simplemente aporta la textura que cualquier gelatina otorgaría de la misma manera. El hecho de seguir incluyendo aleta a la sopa se debe a la falsa creencia popular de que se trata de un potente afrodisiáco.
Se puede substituir la aleta de tiburón por raya (otro pez cartilaginoso emparentado con el tiburón) o emplear un espesante tipo agar-agar. El sabor se mantiene inalterado y los tiburones del mundo entero te lo agradecerán.

INGREDIENTES (4 personas) :

8 trozos de raya
6 setas chinas (también sirve shiitake)
6 brotes de bambú en conserva
1 pechuga de pollo
3 cucharadas de Jerez seco
4 rodajas finas de jengibre fresco
1 litro de caldo de pollo
2 cucharadas de salsa de soja
2 cucharadas de harina de maíz (Maizena)
1 cucharada de aceite de sésamo
Sal
Pimienta blanca molida
Aceite vegetal (de maíz o girasol)


En una olla con litro y medio de agua hervimos los trozos de raya durante media hora. Retiramos y reservamos, dejando que se enfríe. Hacemos lo mismo con la pechuga de pollo.

Mientras se hierve el pollo y la raya,  cortamos las setas en tiras finas. Hacemos lo mismo con el bambú, cortándolo en juliana. Ahora vamos a desmenuzar, también en tiras alargadas, la pechuga de pollo y los trozos de raya. Es mejor hacerlo con los dedos despacio.

En una cazuela honda vertemos el aceite vegetal y en el pochamos las setas y el bambú que habíamos cortado en juliana. Deben quedar bien pasados, así que los mantendremos sin dejar de remover durante diez minutos. 

Transcurrido ese tiempo añadimos el caldo de pollo, el Jerez y el jengibre. Cuando empieza a hervir añadimos la carne de la raya desmenuzado en tiras, el pollo, la maizena, la salsa de soja, el aceite de sésamo y removemos bien, dejando hervir durante quince minutos. Cinco minutos antes de retirar la sopa del fuego salpimentamos al gusto.

Si ni siquiera se quiere emplear carne de raya, podemos substituirla por agar-agar (un espesante obtenido de un tipo de alga) que nos va a dar la misma textura.

Aquí os dejo un documental para que veáis la barbarie que se comete con los tiburones para hacer esta sopa, donde son un ingrediente inútil sin el cual el sabor no se altera y que además de afrodisiaco no tiene nada. Advierto que las imágenes no son aptas para todo el mundo.