No hay nada que más me fastidie que comparen, para desmerecerla, una comida que preparo con otra precocinada o procedente de un fast-food. Ya he dicho muchas veces que las comidas pre cocinadas o procedentes de fast-food son obras de 'ingenieria' que emplean cualquier producto disponible para agradar el paladar consiguiendo el sabor y la textura que atrape al cliente, sea ésto saludable o no. Y generalmente no es saludable.
Pero tenemos buenas noticias si habéis escuchado a menudo que el pollo que se come en KFC o Pollo Campero es mejor que el vuestro. No vamos a imitar el rebozado, cuya composición desconocemos, pero si que podemos obtener algo similar con la seguridad de que empleamos productos 100% naturales.
Toda la magia de este rebozado se basa en una mezcla de especias y en un doble rebozado. Además es recomendable freír el pollo en una freidora o abundante aceite. Si empleáis aceite virgen extra de oliva no tendrá el mismo sabor que el original que pretendéis imitar, así que por una vez emplead aceite vegetal de maíz o girasol.
INGREDIENTES (4 personas) :
Es imprescindible emplear piezas de pollo con hueso y piel. Las mejores son los muslos, las alas y la pechuga. Si mezcláis trozos finos con otros más gruesos deberéis vigilar la cocción de cada uno para hacerlos. Para 4 personas necesitaremos 2 muslos, dos alas completas y 2 pechugas con huesos cortadas en dos mitades, aproximadamente.
2 vasos de harina (400 ml)
2 huevos
1 cucharada de sal
1 cucharadita de pimienta negra
1 cucharadita de cebolla en polvo
1 cucharadita de ajo en polvo
1 cucharadita de pimentón dulce ( o picante, si os gusta así)
1/2 cucharadita de tomillo seco
1/2 cucharadita de orégano seco
1/2 cucharadita de romero seco
1/2 cucharadita de mejorana seca
1/2 cucharadita de salvia seca
1/2 cucharadita de albahaca seca
2 cucharadas de leche
Aceite de maíz o girasol
En un bol mezclamos la harina con todas las especias. Si no tenéis todas estas especias o no queréis perder tiempo en encontrarlas las esenciales son el ajo, la cebolla, la sal, la pimienta negra y el pimentón.
En otro bol mezclamos los dos huevos con la leche. Batimos bien.
Cubrimos bien el pollo con el huevo. Inmediatamente llevamos la pieza al bol con especias y harina y la cubrimos. Una vez bien cubiertas, la volvemos a mojar en el huevo batido y de nuevo al bol con harina. Así conseguimos la doble cobertura.
Sacudimos el exceso de harina e introducimos en la freidora a 300 grados durante unos 20 minutos. Si no tenéis freidora llenad una cazuela con aceite y ponedla a fuego medio. Estará suficientemente caliente cuando echando un poco de huevo batido mezclado con harina burbujee abundantemente.
Se sacan los trozos de pollo, se dejan escurrir un rato, primero en la rejilla del cestillo y luego en papel absorbente. Se espolvorea sal y listos para servir. Seguro que en la comparación ganáis de calle.