Si alguna vez os queréis montar un desayuno "alaturka" más que tomar chai (té) o menemen (tortilla de verduras) o incluso simit (un aro de pan adornado con sésamo) el Çilbir es el que os dejará una profunda impresión.
Pronunciado Chilbir (la Ç se pronuncia como CH en turco), se trata de uno o dos huevos pochados servidos sobre yogur salado, todo ello rociado con mantequilla clarificada (que no mantequilla fundida como a menudo aparece) y pimentón. Lo que se dice un desayuno mayúsculo.
Este plato ha servido de base a otros muy populares en los Balcanes que siguen, con sus más y sus menos, las mismas directrices. También indicar que se trata de una receta muy antigua, practicada a modo de desayuno por los primeros otomanos del siglo XIV.
INGREDIENTES (1 persona) :
- 1 ó 2 huevos (según el hambre que tengáis)
- 1 pote de 120 gramos de yogur griego
- 2 cucharadas colmadas de mantequilla sin sal
- 1 diente de ajo
- Pimentón dulce y pimentón picante
- Sal
- Pimienta negra molida
En primer lugar vamos a preparar el yogur. No se calienta pero es preferible que esté a temperatura ambiente. Se vierte en un bol y se remueve con un diente de ajo pelado pero sin cortar - solo para que tome un poco del sabor - y un pellizco de sal. Se le deja reposar unos 15 minutos.
En segundo lugar vamos a clarificar la mantequilla. Para ello la calentamos en una cazuela a fuego muy lento hasta que funda. Apartamos del fuego y la dejamos reposar. A continuación eliminamos la espuma que se ha formado en la superficie, reservamos en un recipiente aparte la parte licuada semitransparente (que separamos por simple decantación) y desechamos la parte blanca que ha quedado en el fondo (el suero). Mezclamos el pimentón dulce y el picante (si queremos que pique un poco, claro, si no lo dejamos solo con el dulce) y reservamos.
Los huevos pochados, escalfados o poché se consiguen al coagular la clara mientras que la yema queda líquida y por tanto se puede "mojar" como en el caso de los huevos fritos. Para hacer huevos pochados utilizo un cucharón de los que se emplean para servir la sopa. Rompo la cáscara y vierto el contenido en el cucharón de manera que la clara cubra la yema. Echo un pellizco de sal y si se quiere hacerlo picante, un poco de salsa tabasco, pimienta, ají picante, chili etc.
Mientras, he puesto a hervir un cazo con agua y un chorro abundante de vinagre. El vinagre servirá para cuajar con más rapidez la clara.
Coloco el cucharón con el huevo dentro del agua hirviendo. Lo mejor es colocar el metal del cucharón tocando el agua hirviendo pero sin permitir que salte el agua al interior. Cuando la clara empieza tomar un color blanquecino se puede sumergir totalmente. Tranquilos, que el vinagre se encargará de que el huevo no se "diluya" en el agua.
Cuando la clara se ha vuelto blanca, sacad y reservad. La yema estará todavía está líquida a no ser que lo hayáis mantenido más de 2 ó 3 minutos.
Ahora vamos a montar el plato.
Primero colocamos los huevos pochados. Por encima de la clara pero sin tapar las yemas colocamos el yogur sin el diente de ajo.
A continuación vertemos por encima, de nuevo respetando las yemas, la mantequilla clarificada a la que hemos añadido el pimentón.
Salpimentamos las yemas y si queremos el conjunto y listo para comer con unas cuantas rebanadas de pan. Están de vicio.