Un entrante espectacular que encantará a vuestros comensales.
INGREDIENTES (4 personas)
4 patatas grandes
16 gambas
1 sepia
1 guindilla
2 dientes de ajo
Sal
Pimienta
Aceite virgen extra de oliva
Cortamos
las patatas muy finas, a ser posible con mandolina y las dejamos en
agua fría para que suelten un poco de almidón (con 5 minutos es
suficiente).
A
continuación las colocamos sobre un papel para hornear previamente
mojado con aceite, además de salpimentado. El lado que de momento está
"limpio" también lo mojamos en aceite y salpimentamos. Introducimos en
el horno precalentado a 180 grados durante media hora o hasta que las
patatas se doran.
Mientras
vertemos un chorro generoso de aceite de oliva en una sartén y en el
mismo, a fuego moderado, salteamos los dientes de ajo laminados y sin el
germen verde - que repite - y la guindilla en rodajas. Cuando empiezan a
dorarse retiramos los saborizantes y añadimos las gambas peladas y la
sepia troceada, incluyendo los tentáculos. Cubrimos y dejamos hacer unos
minutos hasta que el agua de la sepia desaparece y empieza a dorarse.
Montamos
el plato colocando en la base una rodaja de patata, a continuación una
gamba y un poco de sepia, de nuevo una lámina de patata y así hasta
hacer cuatro pisos.