Otra sopa que ha sufrido muchos varapalos en forma de sobres liofilizados es la sopa jardinera. Es brutal lo que se ha llegado a hacer con ella, más parecida a una sustentación a base de glutamato monosódico de lixiviados de verdura que a una sopa vegana.
Comprendo que es muy fácil agarrar un sobre y verterlo en agua hirviendo, pero si hacéis esta sencilla sopa os daréis cuenta de la diferencia...
INGREDIENTES (4 personas) :
- 1 litro de agua embotellada o filtrada
- 1 cebolla morada grande
- 2 zanahorias grandes
- 1 rama de apio grande sin hojas
- 2 patatas medianas
- 1 puerro
- 1 pimiento morrón
- 1 rama de perejil
- Pasta tipo "conchas"
- Almidón o fécula de patata o harina de trigo
- Sal
- Aceite virgen extra de oliva
- Tomate concentrado o remolacha (opcional)
En una cazuela grande vertemos un chorro generoso de aceite de oliva. En él freímos la cebolla y el puerro cortados en juliana, así como el pimiento morrón en cuadraditos. Cuando la cebolla transparenta podemos añadir una cucharada de almidón o de fécula de patatas. Si no tenéis lo que podéis hacer es simplemente rallar la mitad de una de las patatas.
Mientras hacemos el sofrito calentamos en otra olla el agua y cuando empiece a hervir la vertemos en la cazuela del sofrito. Añadimos la zanahoria cortada en juliana muy fina, el perejil muy picado así como la patata cortada en taquitos pequeños. Dejamos hervir unos diez minutos. Rectificamos de sal.
Añadimos entonces la pasta para que de más cuerpo a la sopa. La cantidad exacta es una cucharada rasa de conchas por comensal. Si queremos añadir un poco de color podemos añadir un poco de concentrado de tomate o remolacha - una cucharadita o menos - , si bien no es imprescindible.
¿A que sabe diferente...como a mejor?