Nuevo libro

Carcamusas de Toledo

Una tapa muy popular en Toledo, creada a mediados del siglo pasado en el Bar Ludeña (restaurante que sigue funcionando y que recomiendo encarecidamente si pasáis por la maravillosa Toledo).

Se trata de magro de cerdo guisada con tomate y guisantes en una salsa un poco picante. Se puede comer como un plato convencional aunque en Toledo la suelen servir como tapa en una cazuelita de barro. 

INGREDIENTES (4 personas) :

  • 1 kg. de magro de cerdo (cortada en tacos)
  • 150 gramos de chorizo para cocinar, picado o en taquitos (lo que encontréis)
  • 150 gramos de jamón en taquitos
  • 1 cebolla morada (dulce) o fresca
  • 100 gramos de guisantes (congelados para una cocción rápida, pero descongelad antes de usar)
  • Un vaso (200 ml) de tomate frito
  • 1 guindilla
  • 1 diente de ajo
  • 1 vaso de vino blanco (200 ml)
  • Sal
  • Pimienta negra molida
  • Aceite virgen extra de oliva

En una cazuela, a ser posible de barro, se vierte un chorro generoso de aceite de oliva. Freímos una guindilla un poco, solo para que deje el sabor y haga el aceite algo picante (tampoco mucho).

Retiramos la guindilla e incorporamos la carne, debidamente salpimentada, dorándola a fuego fuerte pero sin que termine de hacerse. Retiramos y reservamos.

En la misma cazuela incorporamos el diente de ajo y la cebolla, ambos picados. Si falta aceite porque la carne ha absorbido demasiado, añadimos otro poco. Pochamos hasta que la cebolla transparente. 

En ese momento reincorporamos la carne a la cazuela añadiendo el vaso de vino. Cuando el vino se consume a la mitad añadimos el chorizo y el jamón picados, y unos minutos más tarde los guisantes.

Seguidamente vertemos el vaso de tomate frito y dejamos hacer a fuego bajo durante media hora. Antes de terminar la cocción rectificamos de sal y pimienta y listo para servir. Comprobad antes que los guisantes están blandos, que a veces dan sorpresas. Si no es así y falta líquido añadid un poco de agua (pero con prudencia).

Si se va a servir en forma de tapa lo normal son cazuelitas pequeñas de barro con dos o tres cucharadas generosas de la carcamusa. 

Una tapa realmente sabrosa.