La banitsa es uno de los platos más icónicos y queridos de Bulgaria. Tiene una larga tradición en la cocina búlgara y se consume en diversas ocasiones, pero es especialmente popular en celebraciones festivas como la Navidad y el Año Nuevo. Para estas ocasiones festivas se esconde en la misma una moneda o una figurita de porcelana para desear buena suerte a quien la encuentre.
A menudo se sirve como parte de un desayuno festivo junto con yogurt búlgaro, frutas frescas y café. También es un plato popular en las reuniones familiares y sociales.
Aunque se trata de una receta salada, también existen versiones dulces.
La banitsa ha evolucionado con el tiempo y ha adoptado muchas variaciones regionales y personales, lo que la hace única y versátil. A menudo se rellena con queso feta y huevos, pero también se pueden encontrar versiones con espinacas, calabacines, calabaza u otros ingredientes. La masa filo es un elemento clave en la banitsa, y su capa exterior crujiente contrasta perfectamente con el relleno suave y sabroso.
Se puede encontrar en casi todos los Balcanes con diferentes nombres, como el "maznik" de Macedonia del Norte o la "gibanica" serbia.
INGREDIENTES :
- 400 gramos de hojas de masa filo*
- 200 gramos de queso feta desmenuzado.**
- 3 huevos.
- 200 ml (1 vaso) de yogur natural sin azúcar ni edulcorantes
- 1/4 de vaso (50 ml) de aceite vegetal (girasol preferiblemente)
- Sal y pimienta al gusto.
- Mantequilla derretida para untar.
* Es fácil de encontrar ya en casi cualquier supermercado grande, en la misma zona de refrigerados donde podemos encontrar masa quebrada u hojaldre. EN NINGÚN CASO la masa filo se puede sustituir por las antes mencionadas.
** El queso que realmente se emplea en Bulgaria es el sirene, casi imposible de encontrar fuera del país. Se parece al feta, pero es más duro y compacto y algo más salado. El feta griego sirve para una primera aproximación.
Precalentamos el horno a 180°C (350°F).
En un bol grande, batimos los huevos y luego agregamos el queso feta desmenuzado. Mezclamos bien hasta que quede homogéneo. Agregamos sal y pimienta al gusto (poca sal, el feta ya es bastante salado por si mismo).
En otro bol, mezclamos el yogur y el aceite.
Extendemos una hoja de masa filo en una superficie plana y la untamos con mantequilla derretida. Luego, colocamos otra hoja encima y repetimos el proceso hasta tener al menos 4-5 hojas apiladas.
Agregamos una capa de la mezcla de huevo y queso en la parte superior de las hojas de masa filo.
Colocamos otra capa de hojas de masa filo sobre la mezcla de huevo y queso y las untamos con mantequilla derretida.
Continuamos alternando capas de hojas de masa filo y mezcla de huevo y queso hasta que se agoten los ingredientes. Nos aseguramos de terminar con una capa de hojas de masa filo en la parte superior.
Vertemos la mezcla de yogur y aceite sobre la banitsa.
Llevamos la banitsa al horno precalentado y la horneamos durante aproximadamente 40-45 minutos o hasta que esté dorada y crujiente.
Retiramos del horno y dejamos enfriar un poco antes de cortarla en porciones y servirla.
Si queréis darle el aspecto de "ensaimada" típico, es decir, tipo espiral, basta con que hagáis cilindros de masa filo y los vayáis disponiendo en espiral. Esto no cambia para nada el sabor de la Banitsa, así que si no os queréis complicar la vida, hacedla tal y como os indicamos.