Una receta impresionante pero que en realidad sale muy barata. El Calvados es un brandy que se obtiene de las manzanas (es una sidra destilada, por decirlo de alguna manera), así que si no encontraís podéis emplear cognac o brandy o incluso sidra.
INGREDIENTES (4 personas)
Para los Medallones de Cerdo:
- 8 medallones de cerdo (lomo o solomillo de cerdo cortado en rodajas gruesas), aproximadamente 800 gramos de carne
- Sal y pimienta al gusto
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Para la Salsa de Manzana y Calvados:
- 2 manzanas, cortadas en gajos (se pueden pelar o no, al gusto)
- 1/4 vaso de azúcar moreno
- 1/2 vaso de caldo de pollo
- 1/4 vaso de calvados*
- 1 cucharada de mantequilla
- Sal y pimienta al gusto
* Lo dicho al principio, vale algún tipo de licor e incluso sidra.
Para decorar :
- Romero fresco
- Granos de pimienta de colores
Sazonamos los medallones de cerdo con sal y pimienta al gusto. Deben ser algo gruesos, así que se los pedís de esta manera al charcutero o bien los cortáis directamente así de una pieza de lomo o solomillo.
En una sartén tipo grill grande, calentamos el aceite de oliva a fuego medio-alto.
Doramos los medallones por ambos lados, asegurándonos de cocinarlos uniformemente. Para que se marque el enrejado primero hacemos un lado y luego giramos el medallón 90 grados para que haga la forma de rombos (esto es pura presentación, el sabor no cambia en nada). Los retiramos de la sartén y reservamos.
Ahora vamos a preparar la salsa.
Vertemos los jugos de la sartén tipo grill en una sartén normal, de fondo plano. Agregamos la mantequilla y los gajos de manzana. Cocinamos las manzanas hasta que estén doradas y caramelizadas.
Agrega el azúcar moreno y mezclamos hasta que se disuelva completamente.
Vertemo el calvados en la sartén con cuidado (ten precaución, ya que el alcohol puede inflamarse momentáneamente). Deja que el alcohol se evapore durante unos minutos.
Incorporamos el caldo de pollo y cocinamos a fuego lento hasta que la mezcla se reduzca y espese ligeramente.
Probamos la salsa y ajustamos la sazón con sal y pimienta según sea necesario.
Colocamos los medallones de cerdo nuevamente en la sartén, cubriéndolos con la salsa de manzana y calvados.
Cocinamos a fuego lento durante unos minutos, permitiendo que los medallones absorban los sabores de la salsa.
Servimos los medallones de cerdo en platos individuales, cubriéndolos la salsa de manzana y calvados y decorando con los trozos de manzana, romero fresco y granos de pimienta.
Un plato magnífico por muy poco dinero. Hoy en día todo vale dinero, pero la carne de cerdo y la manzana todavía son lo más barato de lo caro.